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News 7

Los antimicrobianos son compuestos químicos que destruyen o inhiben la replicación bacteriana, estos antimicrobianos pueden ser producidos por algunos seres vivos o generados de manera sintética.

Según la OMS, la resistencia a los antimicrobianos es el fenómeno por el cual el microorganismo deja de verse afectado por un fármaco al que anteriormente era sensible.

La resistencia adquirida por las bacterias frente a los antimicrobianos hace parte de la evolución y viene acompañada de cambios en el DNA bacteriano dado por una mutación del microorganismo o por la transmisión del gen de resistencia por parte de otra bacteria. Sin embargo, las mutaciones que generan dicha resistencia son aceleradas por un factor determinante como lo es el mal uso y el abuso de estos fármacos sin análisis previos, basados en conceptos teóricos emitidos.

Figura 1. RESISTENCIA BACTERIANA A LOS ANTIMICROBIANOS, Dr. Rafael Tobías Blanco Vilariño

El antibiograma es la prueba con la cual sometemos un microorganismo puro a diversos antimicrobianos para evaluar la sensibilidad o resistencia a distintos fármacos, permitiendo de esta manera, identificar la molécula con mejor desempeño. 

http://enfermeriamanual.blogspot.com.co/2015/10/cultivo-de-secreciones-y-antibiograma.html

Esta técnica se convierte en una herramienta fundamental para la efectividad del tratamiento después del diagnóstico de la infección, pues garantiza que sea administrado el fármaco con mayor sensibilidad.

Los beneficios del antibiograma además de ir ligados a la efectividad del tratamiento, generan un ahorro económico, pues se evita el desperdicio de medicamentos sin efecto sobre el patógeno a tratar.

Otro de los factores fundamentales en la resistencia microbiana es el tiempo de duración del tratamiento, pues en algunos casos el tratamiento es suspendido con la desaparición de la sintomatología.  Sin embargo, la eliminación del patógeno no ha sido culminada, generando de esta manera la posibilidad de que el microorganismo genere resistencia.  Es por ello que todo tratamiento sobre una infección debe estar siempre dirigido por un profesional del área y soportado con análisis de laboratorio previos al tratamiento.